Fuimos contactados por un emisario
del camarada ‘José’ que vino a esta oficina (Av. Camino Real,
San Isidro), y durante dos meses aproximadamente nos dieron pruebas
de la legitimidad y confiabilidad de la propuesta del grupo armado”,
manifestó Diez Canseco.
En síntesis, el grupo terrorista expresó su deseo de dejar las armas bajo ciertas condiciones, como la amnistía para los presos senderistas, entre ellos Abimael Guzmán. A cambio, renunciarían a la violencia y entregarían las armas.
Según Diez Canseco, los tratos se
hicieron de manera reservada. Cuando el Consejo por la Paz se
disponía a presentar la propuesta al Gobierno, ocurrió una
operación militar que golpeó al grupo terrorista. Ante este hecho,
los elementos de Sendero cortaron las comunicaciones.
El funcionario explicó que ha decidido hacer público este hecho para ofrecer la intermediación del Consejo por la Paz tanto al Gobierno como a Sendero.
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